Es obligatorio tener un seguro médico en Bélgica, el estado provee la cobertura básica.
Empleados y empleadores tienen que pagar para tener un seguro médico (junto con el seguro contra desempleo, la pensión y el seguro contra incapacitación). Todas las contribuciones son utilizadas para mantener estos servicios.
Los extranjeros que llegan a Bélgica y que no trabajarán (pensionados y millonarios) deben mostrar que tienen un seguro médico para poder obtener un permiso de estadía. Hay seguros médicos hechos a medida para aquellos que viajan muy a menudo. Si logras conseguir un estado de “no residente” no tendrás que pagar seguridad social, en este caso necesitarás un seguro de otro país.
Todo empleado y persona que trabaje independientemente debe contribuir su parte a un seguro medico. Algunos seguros están reservados para ciertos grupos religiosos, políticos o profesionales pero la mayoría están abiertos para todos. Tu empleador, tus vecinos y colegas pueden darte información sobre seguros en particular y sus ventajas.
Todos los fondos cobran la misma cuota básica por los que ofrecen beneficios muy similares, la diferencia es que algunos toman más tiempo para reembolsar tu dinero. Tu empleador envía este dinero directamente a tu seguro. Tu contribución es equivalente al 7,35% de tu salario, el 3,55% es extraído de tu sueldo y lo restante (3,8%) de tu empleador. Si trabajas independientemente pagarás la suma completa. La cobertura se extiende automáticamente a los miembros de tu familia, tu esposa o esposo (en caso de que no tenga su propia cobertura) e hijos de hasta 18 años.
Una vez que has ingresado en el sistema de cobertura médico belga, deberás esperar 6 meses antes de poder tener acceso a los beneficios. Este período de espera será cancelado si estabas previamente cubierto por el seguro médico de un familiar o si has estado cubierto por más de 6 meses por otro seguro europeo antes de ingresar a Bélgica.
Generalmente debes pagar todos los servicios médicos, luego tienes que enviar el recibo de lo que has pagado a tu seguro y ellos te devolverán el monto total o una parte según el caso. Muchos toman cobertura adicional para recibir reembolsos más completos y mejores servicios. Algunos empleadores ofrecen cobertura médica suplementaria, si este no es el caso también puedes obtenerla individualmente (claro que tendrás que pagar más). Gente que trabaja independientemente también puede obtener cobertura suplementaria a través de compañías privadas.
Como es de esperar, no es fácil saber lo que el estado cubre y lo que no ya que el sistema es muy complicado. Servicios como hospitalización, medicamentos, embarazo y rehabilitación entre otros están incluidos en el seguro, los que trabajan independientemente sólo están cubiertos contra “grandes riesgos” como enfermedades mentales, tuberculosis, cáncer, enfermedades hereditarias, la labor de parto y cirugía.
Hay 18 categorías de intervención médica, cada una tiene su nivel de reembolso entre el 0% y el 100% (cada vez se reembolsa menos por la dificultad de mantener el sistema). También hay ciertos grupos que tienen derecho a recibir más reembolso que el resto: viudos y viudas, huérfanos y ciegos entre otros. Una persona generalmente obtiene un reembolso del 75% cuando visita a su médico, los de las categorías más privilegiadas pueden obtener el 85% o incluso el 90%.
Es bueno guardar copias de los recibos que envíes a tu seguro que caso de que algo se pierda. No se aconseja enviar los recibos uno por uno, es más practico juntar una buena cantidad de ellos durante un cierto período (6 meses por ejemplo) y luego enviarlos. En caso de que tengas un seguro complementario, tu seguro del estado se encargará de enviárselos a tu seguro privado, ambos depositarán el dinero en tu cuenta.
En caso de que pases un tiempo en el hospital, deberás pagar tu estadía mientras que las otras cuentas irán directo a tu seguro. En caso de que siempre compres tus medicamentos en la misma farmacia, es posible registrarte para que le cobre los gastos a tu seguro directamente (solo tendrás que pagar la fracción que no se reembolsa y no deberás pensar más sobre el tema).
El porcentaje de reembolso que obtendrás de los medicamentos que has comprado dependen del “nivel de necesidad” y de la disponibilidad. Algunas medicinas son reembolsadas al 100%.